9 jul 2010

Al servicio de su majestad

Cuando escriba estas líneas, muy probablemente, Vicky Peláez debe estar alistando maletas en Rusia para venir al Perú, luego del juicio con la sentencia más veloz que, desde que tengo uso de razón, veo. Supongo que el Gobierno de los Estados Unidos quiere evitar que se filtre información con un juicio más largo. Pero lo que realmente ha disparado mi imaginación es el intercambio de espías hecho en Viena. Al más puro estilo cinematográfico: A-L-U-C-I-N-A-N-T-E Toma tus espías, dame mis espías y acá no ha pasado nada, señores. Encima les van a dar una “beca” y hasta con casa sale la cosa. Lucrativo oficio, ¿no? Pero volviendo al tema cinematográfico, todo este penoso lío trajo a mi memoria un juego solitario que tenía de niña. Sí, ése mismo, no me hago. Y es que en mi infancia ya se habían estrenado las películas de James Bond y ya hasta íbamos por Roger Moore como el agente secreto más famoso de todos los tiempos, al servicio de Su Majestad (la de Inglaterra, claro, no la suertuda que irrumpe en los camerinos como si nada) y en verdad, a Sean Connery, no lo conocí sino hasta más grandota, y cuando (ñám!) estaba en su punto. Para qué te digo que no, si sí.

Sin embargo, la primera imagen que tengo de los espías, me la dio una serie de muñecos animados (no de dibujos), cuyo nombre en español no consigo recordar, pero que en inglés eraThe Thuderbirds. Era Ella, la única del equipo que recuerdo, una rubia señorita de la más rancia aristocracia inglesa: Lady Penélope Creighton-Ward, experta en contraterrorismo e inteligencia, manejaba un Rolls Royce rosa y todo. Yo quería ser como Ella. ¿Rubia? ¿De dónde? Bueno, era una fantasía, pues…así, que hice que mi mamá me llevara a la peluquera (4 años tenía) para que me corten el pelo como “lady Penélope” y claro, igualita, igualita, no quedé…bueno, las dos no teníamos tetas, jeje.

Cuando ya era un poquito más grande, apareció mi favorito de todos los tiempos : el Súper Agente 86. El pobre Maxwell Smart era más torpe!!! Pero tenía una suerte que le permitía salir siempre exitoso de sus misiones. Experto en pelea cuerpo a cuerpo, muy valiente y siempre galanazo. Se enamoró de su compañera de misiones, la agente 99, quien sí era inteligente, además de bonita y fashion. Por cierto, nunca supimos su nombre, ya que , cada vez que se veía obligada a decirlo (Ernestine o Susan Hilton), al final resultaba que ése no era su nombre.

A diferencia de los “espías rusos”modernos, que se pasaban la info en la estación del metro y con el FBI pisando sus talones, Smart contaba con una “sofisticada” tecnología para cumplir las misiones que le encargaba su paciente jefe de CONTROL ( la agencia secreta de espías del gobierno americano) . ¿Alguien podría olvidar el zapatófono? Para poder usarlo, le tenía que sacar la suela que ocultaba el disco. También se convertía en pistola marcando el 117 y además podía encontrar teléfonos en los sitios más inusitados como un florero o un sándwich. Mención especial merece el agente 13 que se escondía en los sitios más absurdos. Una vez, Max se lo encontró en el inodoro y le bajó la palanca. Pobre 13. Y sí, también jugué a ser una agente de CONTROL y me peleé con KAOS (la contrapartida criminal de la serie) con mi pistola de Ultra Siete, que arrojaba unos débiles rayos para entonces, pero que era bien paja y recontra espacial. Vale todo cuando una es niña.
La imagen de los espías siempre ha sido muy bien aprovechada por el cine. Esa aura de misterio combinada con inteligencia y habilidades por encima del común de los mortales, constituyen su poderoso atractivo. Pero Mr. & Mrs. Smith a un lado, o Black Widow del otro, lo cierto es que desde que el mundo se organizó como mundo, los espías siempre han sido un secreto a voces. Si no, que lo diga la más famosa espía de todos los tiempos, la exótica Mata Hari quien valiéndose de su atractivo sexual, llevó a su cama a muchos altos oficiales aliados y tomó sus secretos para la causa nazi. Una bailarina que suplió su poco interesante pasado con fantasías de Medio Oriente, por la cual se pagaban altas sumas para contemplarla haciendo strip tease y que llegó a ser una gran estrella del París de la Primera Guerra Mundial. Su fusilamiento , el 15 de octubre de 1917 fue una noticia que dio la vuelta al mundo. Aunque hay teorías que dicen que realmente se trató de un chivo expiatorio, el cine le puso el rostro de “la Divina” Greta Garbo y es un referente continuo en lo que a seducción se refiere. Para aprender, chicas.

Mata Hari

Angelina y Brad, jugando a los espías...y a algo más.

Fallida Scarlett Johanson como Balck Widow en Iron Man 2. Regia la maldita, eso sí.

Más acasito en el tiempo, la guapísima Diane Kruger, en “Bastardos sin gloria”, interpreta a una actriz alemana que sirve como espía para la causa aliada. Es la “llave” que usa Brad Pitt para infiltrarse en un evento en París y así matar a Hitler. En una escena anterior, una de las mejores de la película, la exquisita Diane, se encuentra jugando cartas con unos oficiales alemanes e intenta hacer pasar como oficiales nazis a los bastardos. Hay mucha tensión y parece que lo va a lograr, pero como sucede en las películas de Tarantino, nada está dicho.
 Y así, como tenemos a Diane en la ficción, se dice hubieron muchas mujeres que apoyaron la causa en contra de Alemania. Yo he leído algunas historias de cómo estas valerosas mujeres arriesgaron su vida y en muchos casos la perdieron para ayudar a salvar la de otros, desconocidos que probablemente jamás volverían a ver.Algunas no eran propiamente espías, de esas que roban secretos militares y todo, pero sí realizaban algunas labores asociadas para lograr sus objetivos.
Precisamente en Europa se ha estrenado hace poco más de un año (Abril 2009) la película francesa “Espías en la sombra” (Les femmes de l’ombre), con guión de Laurent Vachaud , crítico de la revista de cine francesa Positiv , totalmente basada en las experiencias reales que vivieron valientes mujeres durante ocupación alemana. La protagonista Louise Desfontaines, miembro de la resistencia francesa, luego de perder a sus seres queridos huye a Londres para unirse a una organización secreta creada por el mismísimo Winston Churchill. Así, Louise , ayudada por otras chicas súper poderosas: Suzy , la bailarina exótica ( viste? Mata Hari, dije); Gaelle , experta en explosivos ; y Jeanne, ex – prostituta de total sangre fría (para espiar, claro, ya colgó los chimpunes), a quienes luego se une María , deben rescatar a un agente británico muy importante que preparaba el desembarco en Normandía. Lamento mucho que esta película no la estrenaran aquí porque el cine francés es especialmente bueno. Una más para buscar en DVD donde el tío Fullvaso.

Te dejo con el tráiler

6 comentarios:

Lulux dijo...

Muy buen post. Mi 007 favorito es Roger Moore, Pierce Brosnan no está nada mal.

Yo pude ver la pelicula francesa de la que hablas "Les femmes de l'ombre" muy buena, ojala la consigas.

Saludos

China Toon dijo...

Hola Lulux! gracias por tomarte el tiempo y comentar. Muero por ver esa película, espero tener suerte.
Me gustan tus blogs, pero en especial el "otro blog". Es muy personal, muy sentido...

Carmen dijo...

El super Agente 86 con su famoso "El viejo Truco de..." era fantastico, como me encantabaaaa no me perdia ni uno solo de sus capitulos, gracias amix por hacerme recordar esos viejos tiempos.besos

China Toon dijo...

Oye , Camiuch ¿Tú te acuerdas de unos cuentos que habían con muñecos? unos que venían empastados en negro con la figurita que se movía...quiero saber la editorial!!!! pucha, qué vieja , no?

Pepik dijo...

Elemental mi querida Watson... nosotras somos las espías secretas del super agente Felipillo....

China Toon dijo...

Amiga Pepik Rockefeller, esta oficina no es la misma sin tí...gracias por pasar por mi casa llena. Mil besos!!!